La combinación de turismo y gastronomía es una aventura para muchos clientes que aprovechan días libres para llevar a cabo una escapada gastronómica. ¿Sabes en qué consiste? ¿O la importancia que tiene la gastronomía para escoger el siguiente destino de vacaciones? ¡Toma nota porque te interesa!

No es ningún secreto que, en los últimos años, la forma de ver, sentir y disfrutar de la gastronomía ha cambiado. Ya no consiste en comer para satisfacer el hambre, sino que se ha convertido en una verdadera experiencia, un placer exquisito y hasta en un hobbie. Probar comidas diferentes mientras se visita una cultura, país o ciudad diferente es tendencia. Si estás pensando en realizar una escapada gastronómica, te explicamos las claves de este tipo de turismo.

¿Qué es el turismo gastronómico?

En una rutina en la que ya lo conocemos casi todo, el disfrutar de las nuevas experiencias resulta una muy grata opción. Por ello, y ante el auge de todo lo relacionado con la gastronomía, se presenta una nueva forma de viajar. Una forma no centrada sólo en visitar lugares, monumentos o rincones del mundo, sino en la que la gastronomía típica trace la ruta.

Degustar los sabores, platos y bebidas típicas. Visitar bares, mercados, viñedos y restaurantes de las diferentes regiones. El principal objetivo del turismo gastronómico es, sin duda, degustar un nuevo mundo al tiempo que se explora. Este tipo de turismo está recomendado para todo tipo de personas. Desde amantes del buen comer, profesionales del sector, o para quienes sencillamente buscan una nueva forma de viajar.

¿Qué, cómo y por qué influye la gastronomía?

Es indudable que la gastronomía hace muchísimo más atractivo cualquier destino. No en vano, es el tercer motivo, tras la cultura y la naturaleza, que las personas tienen en cuenta para decantarse por un lugar u otro, como revela la OMT (Organización Mundial de Turismo).

El principal motivo es que la gastronomía forma parte de la cultura de todos los países, lo que desemboca en la curiosidad por parte de los turistas, de conocer la cocina y bebida autóctona del lugar que visitan. España, Alemania, Francia, Italia… la arraigada cultura culinaria de estos países hace que la competitividad entre ellos en el sector aumente. Consigue también así que se potencie la excelencia de los manjares que se sirven a los clientes, rescatando platos de gran tradición y añadiendo novedades y tendencias. Comer bien es un placer, y si además nos llama la atención el destino escogido, ya tenemos resueltas nuestras próximas vacaciones.

El resultado de esta nueva devoción por la comida es completamente beneficioso para los diferentes locales de restauración. Estos ven cómo sus ingresos aumentan considerablemente. Además, el acceso a internet, permite que los usuarios planifiquen su escapada gastronómica concienzudamente, guiándose de las opiniones del resto de clientes.

¿Cuáles son los destinos más populares en España?

España cuenta con un gran prestigio internacional en cuanto a turismo gastronómico. A nivel nacional, el turismo gastronómico también goza de gran popularidad. Esto se debe a la gran variedad y calidad culinarias que ofrecen las distintas regiones, sus productos locales y su cultura gastronómica. Las actividades más realizadas en este tipo de turismo son: comer en restaurantes, ir de tapas y comprar productos locales. Hablando de regiones en concreto, las comunidades autónomas más populares entre turistas nacionales son Andalucía, Galicia y País Vasco.

En Andalucía, los platos favoritos suelen ser el gazpacho y la amplia variedad de tapas con productos autóctonos: pescaíto frito, ensaladilla… Cabe destacar también la calidad del aceite de oliva y la buena fama de su dieta mediterránea como factores importantes para su popularidad. Una escapada gastronómica a Galicia suele contar con menús marineros en las zonas de costa. Sin embargo, también destacan los productos cárnicos y la empanada. Por su parte, País Vasco es una comunidad famosa por sus pintxos y por la cocina de diseño. Las diferencias entre estas regiones muestran el gran potencial de la cocina del país.

La hostelería nacional ha de explotar esta curiosidad por nuestra gastronomía. La carta y los servicios que ofrezcas en tu negocio también son representantes de la gastronomía de tu región. Puedes destacar productos autóctonos y platos o bebidas típicas en tu carta. De esa manera aprovecharás el interés potencial que suscitan los productos locales y regionales para tus clientes.