La imagen es importante, y aún más cuando se trata de un negocio de hostelería. Y es que, a través de ella, puedes transmitir muchas cosas a tus clientes. Sensaciones positivas como la comodidad o la bienvenida se pueden reforzar a través de la decoración de un restaurante. Pero esa decoración puede inspirar también hostilidad, poco tacto o dejadez.

Escoger el mobiliario de hostelería idóneo para tu local es una de las tareas más importantes que tendrás en cuanto a su imagen. Según lo que incluyas, crearás unas sensaciones u otras y atraerás a un perfil de clientes específico.

Un establecimiento debe conseguir que todos quienes acudan vivan una experiencia única a través de la calidad y el confort. Porque la intención es que disfruten de la visita y quieran volver a repetirla. ¿Sabes cómo lograrlo? Pues sigue leyendo y toma nota.

¡Marchando unos consejos para elegir el mobiliario de tu establecimiento!

1.   Identifica a tu público para adaptarte a él

El menú y el servicio que ofreces no es lo único que define a tu bar o restaurante. Y es que, el mobiliario de hostelería que escojas te ayudará a crear ese ambiente único que buscan tus clientes. Además, también podrás marcar la personalidad de tu negocio y destacar entre la competencia.

Pero el paso fundamental para triunfar con la decoración y funcionalidad de tu local es conocer bien a tu clientela. Una vez identificado tu perfil de cliente, podrás trabajar con mayor seguridad. Con un perfil definido, sabrás la franja de edad aproximada, los días de más concurrencia, su nivel adquisitivo… Por ejemplo, incluso si tuvieran una carta muy parecida y un tamaño similar, un bar de carretera y un bar del centro de una capital tendrían decoraciones muy diferentes.

2.   Elige un estilo acorde a tu imagen de marca

Otro punto imprescindible, a la hora de escoger tu mobiliario de hostelería, es ser fiel a tu imagen de marca. Lo que selecciones debe transmitir al 100% la esencia de tu negocio y los productos que ofreces. Aprovecha las piezas del mobiliario y los elementos decorativos de tu sala para conseguirlo. Esto añadirá un punto de originalidad al local y lo hará más identificable.

No importa cuál sea tu estilo decorativo, pero sí que todo lo que instales se mantenga en la misma sintonía estética. Estilo nórdico, vintage, industrial, modesto, barroco… Escojas el que escojas, no los mezcles sin sentido. Crea tu estilo y sé fiel a él.

 3. Elige los muebles según el espacio del que dispongas

Antes de lanzarte a la compra de los muebles para tu restaurante o bar, piensa bien cómo te gustaría que fuera el resultado final. El espacio del que dispongas delimitará lo que puedes hacer en lo que a mobiliario se refiere.

Por ejemplo, las butacas son muy cómodas para garantizar el confort de los clientes. Pero si la sala de tu bar tiene solamente 12 metros cuadrados, no vale la pena que casi todo ese espacio sea ocupado por butacas muy grandes y cómodas. Ya que impedirá poner más mesas, atender a más clientes y el paso del equipo de sala y clientes.

Ten en cuenta también otros aspectos básicos. Como intentar que nadie se siente muy cerca de los baños o justo frente a la puerta de acceso. Antes de pensar como un profesional de la hostelería, piensa como un cliente. Piensa en cómo te gustaría encontrar la distribución del mobiliario en un local de restauración donde te sientas a comer o a tomar algo.

4.   Ten en cuenta que es una inversión

Económicamente, adquirir los muebles para tu establecimiento puede resultar un desembolso importante. Pero nunca olvides que lo que estás haciendo es invertir en tu proyecto. Si lo haces bien, recuperarás esa inversión con creces.

Lo mejor es marcar un presupuesto para el mobiliario de hostelería y ceñirse a él. Ya sea antes de abrir el local al público o a la hora de renovarlo.

Una vez fijado el presupuesto, has de repasar todos los puntos anteriores para adquirir los muebles adecuados. Busca con detenimiento porque seguro que consigues encontrar la conjunción ideal.

Tu negocio debe proporcionar a los clientes una experiencia completa y perfecta en todos los sentidos. Y, sí, una buena selección de los muebles te ayudará a conseguirlo. ¡Adelante!